Por: Mgt. Marcela Leal / Red IESVIDAS (Investigaci&oacute;n en Estilo de Vida Saludable). Representaci&oacute;n por Argentina. leal.nutricion@gmail.com Fotos: Banco de im&aacute;genes MSc. Marcela Leal&nbsp; Las dietas sustentables son modelos de alimentaci&oacute;n de un bajo impacto ambiental, con la adici&oacute;n de recomendaciones de ingesta de nutrientes saludables para el mantenimiento de una buena salud. Adem&aacute;s, hay otras consideraciones a tener en cuenta como por ejemplo &aacute;reas prioritarias que necesitan mayor investigaci&oacute;n de aqu&iacute; al futuro o consejos de conducta.&nbsp; Las recomendaciones generales de una alimentaci&oacute;n saludable y sostenible se basan en recomendaciones como comer la cantidad necesaria de alimentos para el logro de un equilibrio entre lo que ingerimos y lo que gastamos. Tambi&eacute;n considerar que todos los micronutrientes son importantes, y en consecuencia podremos ingerir de todo pero con moderaci&oacute;n. Las dietas variadas nos permiten la ingesta de todos los nutrientes que necesitamos. Consumir alimento pensando en el medio ambiente, es decir que la dieta debe ser local, estacional y tradicional; a la vez que producida de manera sostenible. Algunos pa&iacute;ses realizan una compra institucional de los alimentos como un ejemplo de una adecuada pr&aacute;ctica tanto en salud como en sostenibilidad. Estrategias como el aumento del consumo y producci&oacute;n nacional de frutas y hortalizas son muy eficientes.&nbsp; Una dieta sustentable incluye mensajes relacionados con el consumo de todos los grupos de alimentos. En lo que respecta a la carne, los principales mensajes de las gu&iacute;as alimentarias de doble prop&oacute;sito (nutricional y sostenibilidad), en algunos pa&iacute;ses son los siguientes:&nbsp; Alemania:&nbsp;&ldquo;Coma carne con moderaci&oacute;n. La carne blanca es m&aacute;s saludable que la carne roja.&rdquo; Brasil:&nbsp;&ldquo;Intente limitar la cantidad de carne roja.&rdquo; Suecia:&nbsp;&ldquo;Coma menos carne roja y elaborada (m&aacute;ximo 500 gramos de carne cocinada a la semana). Solamente una peque&ntilde;a parte de esta deber&iacute;a ser carne elaborada.&rdquo; Qatar:&nbsp;&ldquo;Elija cortes de carne magros. Limite el consumo de carne roja (500 gramos a la semana). Evite las carnes elaboradas.&rdquo; Una dieta sustentable tambi&eacute;n considera los CONSEJOS DE CONDUCTA, adem&aacute;s de las recomendaciones referidas a la cantidad y composici&oacute;n de los alimentos que la conforman. Algunos de estos consejos de conducta son: Cocinar los alimentos preferiblemente a fuego lento, y en la medida de lo posible en un corto tiempo de cocci&oacute;n.&nbsp; El m&eacute;todo de cocci&oacute;n elegido tiene que utilizar poca cantidad de agua (para evitar disoluci&oacute;n de sustancias nutritivas en el l&iacute;quido de cocci&oacute;n) y de grasas (para que la receta sea saludable).&nbsp; Utilizar ingredientes frescos en la medida de lo posible, lo cual tiene una importante contribuci&oacute;n a disminuir el desperdicio innecesario de envases.&nbsp; Tomarnos el tiempo necesario para comer para que el momento sea un disfrute.&nbsp; Realizar todas las comidas con regularidad y atenci&oacute;n, eligiendo un ambiente apropiado e idealmente en compa&ntilde;&iacute;a.&nbsp; Cocinar m&aacute;s. Es importante desarrollar, ejercitar y compartir habilidades culinarias. Rescatar recetas de nuestros antepasados es una manera de valorizar la cultura gastron&oacute;mica de cada pa&iacute;s.&nbsp; Planificar nuestros tiempos de manera tal que los alimentos y la alimentaci&oacute;n ocupen un lugar importante en nuestra vida. Realizar un buen an&aacute;lisis de la publicidad y el marketing de alimentos con la finalidad de realizar elecciones saludables.&nbsp; Moderar la ingesta e ingerir solamente la cantidad justa de alimentos.&nbsp; Transmitir a todos los miembros de la familia h&aacute;bitos alimentarios saludables. Los h&aacute;bitos deber&iacute;an incluir un horario regular de comidas, que por lo menos una comida al d&iacute;a se realice en familia.&nbsp; &Aacute;REAS QUE NECESITAN MAYOR INVESTIGACI&Oacute;N:.&nbsp;Los estudios del tema nutrici&oacute;n y sostenibilidad, realizados por instituciones vinculadas a salud, nutrici&oacute;n y medio ambiente; han planteado la existencia de algunos puntos conflictivos. Por ejemplo en el caso de las hortalizas; si bien son buenas para la salud, aquellas cultivadas en invernaderos con calefacci&oacute;n tienen un mayor impacto clim&aacute;tico. Sin embargo, la evidencia es optimista respecto a la posibilidad de nuevos avances que podr&iacute;an reducir este impacto. Por ejemplo la utilizaci&oacute;n del calor residual de las industrias cercanas, como as&iacute; tambi&eacute;n usar fuentes de energ&iacute;a renovables. Algunos pa&iacute;ses consumen alimentos provenientes de invernaderos calefaccionados con energ&iacute;a geot&eacute;rmica.&nbsp; RECOMENDACIONES ADICIONALES,&nbsp;para tener una real incidencia sobre el impacto ambiental de las dietas, las gu&iacute;as alimentarias de doble prop&oacute;sito deben incluir las siguientes consideraciones:&nbsp;&nbsp; Deben ir acompa&ntilde;adas de informaci&oacute;n respaldada, que de cuenta de los v&iacute;nculos existentes entre salud y sostenibilidad con la finalidad de que la poblaci&oacute;n est&eacute; informada acerca del v&iacute;nculo entre los alimentos y la sostenibilidad.&nbsp; Dar a los consumidores informaci&oacute;n para que conozcan los modelos diet&eacute;ticos recomendados.&nbsp; Ser factibles de ser cumplidas a la vez de ambiciosas. Es muy importante considerar los modelos de consumo actuales y el contexto cultural en el cual se dan las mismas. Y los objetivos impuestos a la comunidad deben ser lo m&aacute;s realistas posibles. Con recomendaciones graduales podremos logar el cambio perseguido hacia la incorporaci&oacute;n de los modelos diet&eacute;ticos realmente sostenibles. <p style="text-align: center;"> PARA EL CASO DE LA CARNE VACUNA, los modelos recomendados (saludables y sostenibles) es fundamental que aporten recomendaciones u orientaciones claras para el consumo de carne (no solo cantidades m&aacute;ximas, sino tambi&eacute;n sugerencias sobre c&oacute;mo lograr que los cambios resulten atractivos y factibles). Siempre considerando que las recomendaciones deber&aacute;n estar adaptadas a cada contexto espec&iacute;fico. Para aquellos pa&iacute;ses con un consumo elevado de carne, como lo son los pa&iacute;ses desarrollados, deber&iacute;an incluir orientaciones sobre la reducci&oacute;n del mismo. Y para el caso de los pa&iacute;ses que van registrando que la ingesta per c&aacute;pita est&aacute; aumentando, se recomienda realicen un ofrecimiento de recomendaciones para la moderaci&oacute;n del consumo, evitando as&iacute; se llegue a todos los problemas relacionados con los niveles de consumo de aquellos pa&iacute;ses que reportan un alto consumo de carne. Mientras que para los pa&iacute;ses cuyos ingresos son bajos, donde el consumo de alimentos de origen animal suele ser muy baja, las recomendaciones deber&iacute;an orientarse hacia el incremento de la variedad en las dietas, fundamentalmente con orientaciones hacia un mayor consumo de hortalizas, frutas, leguminosas, nueces y algunos productos c&aacute;rnicos y l&aacute;cteos. En resumen, la evidencia reporta la incorporaci&oacute;n cada vez mayor de modelos saludables y sustentables en las gu&iacute;as alimentarias de varios pa&iacute;ses, como un modelo diet&eacute;tico recomendable tanto para la salud de las personas como la salud planetaria. Sin embargo tambi&eacute;n se han identificado algunas &aacute;reas prioritarias para el futuro, como agua, investigaci&oacute;n y desarrollo, pobreza y modelos de alimentaci&oacute;n y seguridad alimentaria, que aportar&aacute;n las soluciones necesarias para el cumplimiento del objetivo del logro de una alimentaci&oacute;n que adem&aacute;s de saludable tenga en cuenta el cuidado del planeta. Fuente: Revista AmeriCarne N&ordm; 151